Líderes al frente
Cualquier iniciativa importante necesita el apoyo de nuestros líderes. Los líderes definen la necesidad del cambio para la diversidad y la inclusión, establecen el tono de lo que es importante y presentan los argumentos empresariales. Dan el ejemplo a los demás y se comportan de forma que reflejan y refuerzan un entorno inclusivo y meritocrático.

Cada persona es responsable
El cambio comienza con nuevas perspectivas. Para convertirnos en una cultura más inclusiva, examinamos la forma en que nuestros puntos de vista condicionan la mentalidad y los comportamientos, tanto conscientes como inconscientes. Comprendemos el vínculo positivo entre una cultura inclusiva, una mejora del compromiso de los empleados, la innovación y, en última instancia, los mejores resultados comerciales.

La diversidad y la inclusión influyen en cómo trabajamos en toda la empresa
Nuestra cultura es la base de cómo se hacen las cosas. La diversidad y la inclusión son una parte integral de nuestra cultura y, como tal, las políticas, los procedimientos y los sistemas de los empleados reflejarán este compromiso. Como meritocracia, Chubb se esfuerza por reclutar, desarrollar y retener a los mejores talentos.

Tomamos decisiones a través del conocimiento de los datos
El examen de los datos demográficos de nuestra fuerza laboral proporciona un punto de referencia necesario. El establecimiento de medidas cualitativas y cuantitativas nos permite evaluar el progreso, responsabilizarnos y mejorar continuamente. Esto incluye compartir los resultados e impulsar la responsabilidad con la misma disciplina y rigor con que abordamos la resolución de cualquier problema.

Claridad en el mensaje
La comunicación y los mensajes refuerzan nuestro compromiso. Nuestro objetivo es que los líderes transmitan la cultura deseada de forma clara, constante y repetida. Tenemos previsto mostrar éxitos, historias, mejores prácticas, logros y conocimientos a través de los canales de comunicación.
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